-La Policía Local de Guillena se suma a la campaña que está realizando la DGT esta semana. Hasta el 13 de octubre habrá controles de tráfico
-Es el primer factor concurrente más habitual en los siniestros de tráfico, estuvieron presentes en el 30% de los siniestros con víctimas que se produjeron en 2023.
-Las actividades que obligan al conductor a desviar la mirada de la carretera por más tiempo y/o realizar actividades manuales combinadas con actividad cognitiva aumentan significativamente el riesgo de colisión.
-El uso indebido del teléfono móvil mientras se conduce continúa siendo la distracción sancionable más frecuente
La Dirección General de Tráfico, a través de los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y de los de todas aquellas policías autonómicas y locales que quieran sumarse, ha puesto en marcha esta semana una nueva campaña específica de vigilancia que durará hasta el próximo domingo 13 de octubre y que, en esta ocasión, estará centrada en las distracciones al volante.
A esta campaña nacional se suma la Policía Local de Guillena que está realiznado controles de tráfico aleatorios para prevenir el uso de dispositivos electrónicos al volante, como pueden ser el móvil, tablets, reproductores de música, cascos o auriculares, etc
Las distracciones al volante son el primer factor concurrente en los siniestros mortales de tráfico. Solo en 2023, estuvo presente en el 30% del total de estos siniestros, un porcentaje que ha aumento en dos puntos respecto a 2019, por lo que este tipo de campañas siguen siendo imprescindibles para alertar de los riesgos que implica la conducción distraída o desatenta.
Para ello, los agentes vigilarán tanto las vías interurbanas como las del ámbito urbano. A esta vigilancia a pie de carretera hay que añadir los medios automatizados de los que dispone la DGT con 253 cámaras instaladas en las carreteras, a través de las cuales se puede constatar, entre otras cosas, si el conductor hace uso del móvil mientras conduce.
Las distracciones al volante son un factor de riesgo significativo en el tráfico. La conducción distraída es un fenómeno frecuente que ocurre cuando se desvía la atención de las tareas necesarias para conducir y al mismo tiempo se realizan otras actividades ajenas a la propia conducción, desviando la mirada de la carretera durante algunos segundos.
La naturaleza de la distracción y su tiempo de duración tienen también un impacto directo en el incremento del riesgo de siniestro. Y, en ese sentido, se ha comprobado que actividades que obligan al conductor a desviar la mirada de la carretera por más tiempo y/o realizar actividades manuales combinadas con actividad cognitiva aumentan significativamente el riesgo de colisión.